miércoles, 10 de marzo de 2010

Di que soy un pájaro

¡Venga Hugo!
Hay una chica que corre desenfrenada en esa plaza abarrotada de gente. Salta contenta. Feliz. Enamorada. Sin pensar en otra cosa, sintiéndose en paz, relajada y tranquila. Grita otra vez:
¡Venga Hugo, píllame! - y despliega sus brazos, simulando ser un pájaro que vuela en un cielo que es completamente azul en una tarde de abril.

Hugo suspira y sonríe divertido. Coge su cámara de fotos e inmortaliza ese momento sin que ella se de cuenta. Raquel está volando, quizá muy lejos de aquí, en otro mundo. Su melena clara, se eleva con ella. Los ojos los tiene cerrados y los brazos siguen siendo las alas de un pájaro imparable. Parece una foto de película. Hugo sonríe otra vez. Y vuelve a enfocar con su cámara. ¿Dónde se ha metido?. No está. Echa un vistazo a su alrededor.

Raquel se adelanta, rápido, como un chispazo de fotografía y abraza a Hugo por detrás.

-¡No te escapas! -dice abrazándolo aún más fuerte-.
-Me habías asustado, ¿eh? Por un momento pensé que te habías ido volando y que no volverías nunca más.

No hay comentarios: